¿El rechazo de la vida?


“La vida no te rechaza, sino que define mejor tu perfil personal y luego profesional”
 

Definamos rechazo:
El vocablo rechazo acepta varias definiciones
          
1-Resistencia que presenta un cuerpo a la fuerza ejercida por otro, obligándolo a retroceder en su curso o movimiento.
2- Enfrentamiento u oposición a una idea, acción o situación.
3-Yo agregaría también rechazo como concepción de desagrado, disgusto.

¿Qué significa conocerse?

Significa el poder esbozar en un papel físico o mental cuales cualidades abarco desde mi percepción y la percepción del otro. Luego elijo , cual decido aprobar.
A veces, ambas percepciones son correctas en proporción y otras en su totalidad.
Por eso existe la resonancia o la retroalimentación.
Aprende del rechazo como aprende de la aceptación.
Aprende de los oscuros, de los grises y matices.
Aprende cada vez que decidas correr o caminar

Supongamos que te gusta un trabajo y no quedas.
Supongamos que te gusta una mujer y no acepta ni un saludo
Supongamos que te gusta un hombre y no acepta una cita.
Supongamos que un amigo o amiga no acepta una charla contigo.
Supongamos que como no te aceptan te “rechazan”.
Un trabajo, una mujer, un hombre, amiga, amigo que te agrada NO te rechaza, te ayuda a definirte mejor como persona o profesional.

Ayudan a conocerte y acercarte a la dirección que necesitas encontrar.
Ayudan a definirte mejor como persona y luego como profesional, porque este último nace de seres con pensamiento.

¿Cuál es la dirección?

En un trabajo, el correcto acorde a tu formación y cualidades.
En una pareja, el correcto acorde a tus cualidades y objetivos compartidos.
En amistades, la correcta acorde a objetivos compartidos y valores.

Entonces, ¿Qué es el rechazo?

Es la posibilidad de acercarte a la dirección correcta de tu camino.
Es la posibilidad de reconocerte y encontrarte con vos mismo.

Y.O. 06-04-2018




Comentarios

Entradas populares de este blog

Elige bien la semilla que siembras

Circuito: Caer y levantarse

Soy una persona corriente que avanza- Enrique Llimona